Luz verde para megaproyectos de infraestructura

El presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, anunció el aumento del perfil de vigencias futuras que pasa de 0,6% a 0,8% del PIB para proyectos de infraestructura, desde la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) presentamos el portafolio de megaproyectos férreos, carreteros, fluviales y aeroportuarios, que desde el ‘Gobierno del Cambio’ se pretenden estructurar y licitar durante el cuatrienio.

 

Una de las apuestas del Gobierno Cambio se centra en la reactivación de la red férrea y para ello ya está adelantando la estructuración y/o licitación los proyectos de Asociación Público-Privada de La Dorada – Chiriguaná; Bogotá – Belencito, y el Tren del Pacífico.

 

Otro de los retos que tiene el Gobierno en el cuatrienio, es desarrollar megaproyectos de infraestructura carreteros que mejoren los indicadores de competitividad y productividad; entre ellos se resalta, la estructuración de la doble calzada Pasto – Popayán, Villeta – Guaduas y Zipaquirá – Barbosa, y la conexión vial de Sogamoso - Aguazul - Maní – Puerto Gaitán, que acercará a los departamentos de Casanare, Meta y Boyacá, que se abrirán a licitación en los próximos meses.

 

Los aeropuertos también hacen parte del paquete de proyectos que se concesionarán; se espera una inversión de 30 billones de pesos para los aeropuertos de Neiva, Cali, Buenaventura, Cartagena y San Andrés, los cuales se harán bajo el esquema de Iniciativa Privada.

 

En el tema fluvial, la Agencia Nacional de Infraestructura proyecta la navegabilidad del río Meta y Atrato, así como la adecuación, mejoramiento y mantenimiento del puerto de Tumaco (Nariño). Así mismo, desde la ANI nos estamos preparando para iniciar con la fase de pre-construcción del Canal del Dique, la cual fue licitada por 3,2 billones de pesos, la inversión más importante del modo fluvial en Colombia.

 

Estos megaproyectos hacen parte del plan del Gobierno Nacional para promover la intermodalidad y la necesidad de reconfigurar la cadena logística, buscando reducir los costos logísticos (transporte), generar las condiciones óptimas para la implementación de la operación y aumentar los niveles de competitividad en el país.